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Consejos para cocinar pasta sin gluten

Vivir con EC

Si eres celiaco o celiaca seguro que más de una vez te habrás peleado con la pasta sin gluten intentando cocinarla. Quizás se haya quedado apelmazada o puede que te haya quedado dura como una piedra o que se haya pasado… ¡Es normal! La pasta sin gluten es más delicada que la pasta hecha de trigo. 

Aunque hoy en día la calidad de la pasta sin gluten ha mejorado mucho, te recomendamos que sigas estos consejos a la hora de cocinarla, para conseguir un resultado final para chuparte los dedos:

No escatimes con el agua de cocción. 

La recomendación es usar un litro de agua por cada 100 gramos de pasta. La pasta debe tener espacio suficiente para moverse y que se cueza de manera uniforme.

Espera a que el agua hierva para echar la sal y luego la pasta. 

La recomendación es 7 gramos de sal cada 100 gramos de pasta. Los italianos recomiendan usar sal gorda. Cuando eches la pasta, ve removiendo de vez en cuando.

Respeta siempre el tiempo de cocción que indica el fabricante. 

No obstante, te recomendamos que vayas probando para conseguir la textura deseada. ¿Sabías que la pasta al dente (más dura) es mejor para la digestión y reduce los picos glucémicos?

No mezcles dos tipos de pasta ni de fabricante. 

Puede ser tentador que si te quedas corto/a de espaguetis completes la ración con unos poquitos de tallarines… ¡Error! Cada tipo de pasta tiene un tiempo determinado de cocción.

No eches aceite al agua de cocción. 

No sirve para evitar que se pegue la pasta. En tal caso, lo puedes echar después, una vez escurrida.

Ve preparando la salsa mientras se cuece la pasta. 

Es mejor que la salsa espere a la pasta a que sea la pasta la que espere a la salsa. Si dejas la pasta esperando dentro de la olla con el agua, se puede pasar, y si la dejas mucho tiempo escurriendo puede pegase o quedarse dura. Consejo extra: puedes usar el agua de la cocción de la pasta para la salsa, te quedará más sedosa. 

No enjuagues la pasta una vez cocida. 

Lo único que harás será enfriarla y puede que romperla si el agua sale con mucha presión, además de perder textura.

¡RECUERDA! NO COMPARTAS AGUA DE COCCIÓN NI UTENSILIOS

Si cocinas pasta con gluten no debes usar la misma agua de cocción para cocinar pasta sin gluten. Tampoco compartas utensilios.  Si lo haces, lávalos bien primero con agua y jabón.

Autor: FACE

Más información: celiacos.org

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